martes, 16 de junio de 2009

Ahora


Ahora que lo que Zapatero te da por un lado para que te compres un coche, y así estimular la economía, te lo quita con la subida de impuestos en la gasolina, para estimular la caja de la recaudación. Ahora que los bancos no te dan un euro, justo cuando está el dinero barato. Ahora que todo fluye y gira en el sentido en el que ellos quieren que gire. Ahora son necesarios el arte y la cultura para soportarlo todo. Y mucho más el teatro.

Y ahora es necesario decir que el Festival de las Artes de Castilla y León debe celebrarse y hacerlo para siempre en Salamanca. Por mucho que algunos digan que esto no sirve para nada y que afirmen que esto es como el traje nuevo del emperador. Y no es que los demás no seamos críticos, pero lo somos con determinados aspectos de la gestión y preferimos preguntarnos cosas y dudar a criticar sin pasar ni un solo día por el Teatro Liceo o el CAEM.

Ahora, por ejemplo, podemos preguntarnos ¿por qué el Festival tiene tan poca visibilidad nacional e internacional? ¿Por qué se ve a pocos programadores de otros festivales en el patio de butacas? ¿Por qué un belga no estrena su espectáculo aquí y sí lo hace en Avignon? ¿Por qué pagas mucho dinero por traer un excelente trabajo de Jan Fabre y no viene a presentarlo y a dar una charla el propio Jan Fabre? ¿Por qué no te preocupas por traerte a los seis directores más reconocidos del panorama internacional y haces algo con ellos durante tres días? ¿Por qué unos años la programación de teatro de sala es tan buena y regular como la de este año y otras ediciones no se salva ni el veinte por ciento de las producciones, como en 2009? ¿Por qué las entradas vienen numeradas y la gente se sienta donde le da la gana? ¿Por qué este año no ha habido abonos? ¿Por qué la programación se anuncia tan tarde? ¿Por qué se cierra el V Festival con un espectáculo tan pobre como el de Alicia Soto y Post Theater? ¿Por qué hay gente tan idiota que quieren que esto se vaya a otra ciudad? ¿Por qué había espectáculos de calle programados a la intempestiva hora de las tres de la tarde? ¿Por qué Lev, Mortal Engines, Orgy of tolerance eran tan buenas y Yo en el futuro o Super Gravity-Zero Gravity tan olvidables? ¿Por qué cuando baja el presupuesto se empieza a llamar a gente de Salamanca? ¿Por qué se ve tan poco ambiente de Festival en la calle?

La única respuesta que se me ocurre ahora es que por esto es por lo que precisamente me gusta el Festival. Vamos, que me hace sentir más libre, más abierto, con más dudas. ¡Que no todo debe ser dinero bien gestionado para subvencionar libros aburridos y pedantes! El resto pregúntenselo a Guy Martini y a la persona que le contrata. Seguro que ellos tienen una respuesta. Otra cosa es que nos convenzan.

1 comentario:

Juanvel dijo...

Quiero que sepas, que personalmente, comparto casi todas tus preguntas retóricas.
Sólo comentarte que la valoración que hizo la organización del Festival la focalizó en los 180.000 supuestos espectadores, poco más.
Y también decirte, que el año pasado, después de la conclusión del IV, "alguien" recomendó a Guy (al margen de algún que otro atentado al patrimonio, discutible) que debiera siempre programar considerando el tejido cultural y social de la ciudad (además de los potenciales visitantes) y hacerles partícipes (a artistas, creadores y vecinos de la ciudad) de un Festival que nunca debe irse de Salamanca.
Pero sólo quiero que valores conmigo: El evento terminó, casi un millón y medio de euros también, y en qué cambió la ciudad (desde el punto de vista de la cultura) desde hace un mes para acá, en qué varió su futuro?