domingo, 15 de junio de 2008

Anjo Negro


Dirección: Frank Castorf
Fechas: 14/06/2008
Teatro: CAEM
Aforo: Dos tercios
Fea y aburrida

Resulta que va uno al teatro alegre y contento después de ver el gol de Villa en el último minuto y se encuentra con esto. No hay derecho, hombre. No hay derecho. Dos horas y cuarto soportando un tostón que no se salva ni con la excusa de no tener el vestuario. Esfuerzo encomiable, pero infrucutoso. Victoria pírrica, sobre todo para el público que aguantó hasta el final.

No sé qué es más aburrido, si este montaje de Frank Castorf, un partido amistoso con prórroga y penaltis de la selección española o tres horas sin descanso de teatro balinés.Podemos estar de acuerdo en que es expresionismo. Perfecto. Podemos estar de acuerdo en que es más teatro que otros montajes. Perfecto.

En lo que no puedo estar de acuerdo es en que para hacer expresionismo haya que estar dos horas y cuarto dando voces. En lo que no puedo estar de acuerdo es que para transmitir al espectador los sentimientos del autor haya que gritar todo un espectáculo. En lo que no estoy de acuerdo es que para provocar haya que contar una historia absolutamente aburrida. Una cosa es la provocación y otra cosa es el aburrimiento. Anjo negro ni provoca ni transmite: aburre y es fea por muchos desnudos, violaciones y escupitajos que uno introduzca.

Es más, las supuestas referencias al propio teatro, como las conversaciones de los intérpretes con los cámaras que retransmiten en directo algunas partes del montaje, son de lo más naif que se ha visto últimamente por estos lares. Eso sin contar que el que metía los subtítulos no acertó ni una.
Por salvar algo, debemos decir que tiene dos pequeñas escenas en alemán muy líricas y con emoción.

Eso sí, había conflicto, sangre, celos, crucifixiones, muchos intérpretes en escena, a los cuales no se les vio sus dotes interpretativas escondidos tras sus gritos pelados, diseño de luces… lo que yo no vi fue mucho teatro.

1 comentario:

Roberto García Encinas dijo...

mi critica es un tanto diferente... que bonita la diversidad de opiniones. Leela... ya hablamos